La Unión Europea ha promulgado una nueva directiva con el objetivo de promover sistemas de calefacción sin emisiones y que en 2040 ya no se usen calderas de gas. Esta medida responde a la preocupación por los efectos negativos que el gas provoca en el medio ambiente y en la salud pública.
El gas, a pesar de ser una fuente común de calor en muchas viviendas, emite una gran cantidad de gases de efecto invernadero. Su combustión contribuye al calentamiento global, y puede ser perjudicial para la calidad del aire interior en los hogares, lo que aumenta el riesgo de enfermedades respiratorias y cardiovasculares.
En este contexto, se anima a los ciudadanos a considerar alternativas más sostenibles y limpias para la calefacción doméstica. En Therminer, utilizamos tecnología de vanguardia para ofrecer un rendimiento eficiente y respetuoso con el medio ambiente.
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En un momento en que la sostenibilidad y la salud son prioridades globales, la elección de soluciones como la de Therminer, no solo beneficia a tu hogar, sino que también contribuye al bienestar colectivo y a la preservación del planeta.
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